Lecciones

13.7.08


Muchos ven a la etapa escolar como un periodo de transición, una época apuntada a sociabilizar con otros de nuestra misma edad pero en que, académicamente hablando, no se aprende mucho. Seguro alguna vez te quejaste a la hora de estudiar Biología cuando tenias re decidido ser abogado o para que aprender análisis sintáctico si ibas a ir a Ingeniería de Sistemas. ¿Cultura general? A nadie le importaba eso.
De todas las materias una de las más odiadas era Educación Física, algo sumamente entendible. Quien quería a las 8 de la mañana ponerse a dar vueltas carneras, saltar en el cajón o hacer flexiones. No se ustedes pero yo no... La sola idea de tener que salir a ese galpón enorme, con piso de mosaicos poco aseado, que en invierno era una imitación del círculo polar ártico, que en época de lluvias parecía pileta olímpica y que en verano era el infierno personificado en la tierra, esa sola imagen en la cabeza lograba desalentar hasta al más deportista.
Nadie quería que llegaran los martes y jueves porque significaba soportar una rutina de ejercicios copiada de la guerrilla paquistaní. Pero lo cierto es que, más allá de la parte física de la clase, yo logré sacar algunas cosas en limpio, enseñanzas que hasta el día de hoy me acompañan.
Un recuerdo que tengo muy presente fue de cuando la señora profesora que tenia en ese momento no tuvo mejor idea que hacernos practicar corridas. Sin demasiado entusiasmo armamos tres hileras en una punta del odioso galpón. Al primer silbido salio el primer grupo a toda velocidad hasta los arcos en el otro extremo pero metros antes de llegar mis tres compañeros bajaron la velocidad considerablemente. Segundo silbido, otros tres hicieron el mismo trayecto y al igual que sus antecesores frenaron en el ultimo tramo. Dos silbidos seguidos y la profesora nos mando a reunirnos a su alrededor. Con cara de pocos amigos reto a los pobres que habían tenido la mala suerte de ser los primeros y nos dijo a todos en general: “es importante que siempre cuando estén llegando al final, aunque estén cansados, aunque no les de el aliento, las piernas se les aflojen y sientan que no pueden mas, en ese momento es cuando mas rápido tienen que ir, saquen fuerzas de donde puedan y no decaigan. Ahí tienen que explotar al máximo su fuerza para no arruinar todo lo que lograron antes”.
Justamente en eso pensaba esta semana. Dos entregas importantes, un parcial, poco tiempo, feriado de por medio. Todo eso de tradujo en pocas horas de sueño, mucho café, unas ojeras que parecía recién salida del ring y obviamente un humor de perros como para cerrar el combo. En el momento en que casi tiro todo y me hecho a dormir, me acorde del tiempo invertido en esos proyectos, de que no solamente estaba en juego mi nota sino también la de mi compañero y de mi objetivo de recibirme antes de los 40 años. Tome impulso y otra tasa de café y no me deje doblegar, ojala todo ese esfuerzo haya valido la pena.

7 Complicidades Verborrágicas:

Revista en Voz Alta dijo...

ME OLVIDÉ LA CAMARITA... =(

Las fotos q salen por ahí son de los paparazzos...capisce? =P

ABRAZO BRAZO BRAZO!

...DE UN AMIGAZO! XD



AGUSTÍN

PD: ESAS CHINITAS QUE BAILAN ME ESTÁN PONIENDO NERVISO... les voy a tirar con algo jaja. UN BESO!

LooK Ass dijo...

Muy bueno el mensaje...En primer año de la facultad fui el mejor alumno del curso (no exagero), y después me vine a menos. Se me aflojaron las piernas y se me acabó el aire...voy a poner en practica esto, a ver que pasa...

saludos...

http://bandadelocos.blogspot.com

Anónimo dijo...

Al final fue una gran enseñanza la de la profe, no?
A mi me encantaba Educ. física, y no nos hacían hacer mucho esas pavadas de flexiones y eso, deportes y el clásico quemado.

Patricio dijo...

Hola flor :) gracias por pasar che..por suerte este cuadradito es un poco más grande..jaja..
te agrego a la lista de blogs amigos.. asi entro de vez en cuando...
besotes! seguimos en contacto
Pato

Patricio dijo...

jeje.. perfecto.. espero q entre mas gente ahora:p

me colgue viendo las 1001 peliculas q hay q ver antes de morir... el otro día caminaba por la calle y vi un libro q se llamaba asi..
me dije: uhh.. me lo compro...

el precio no me dejo..

besotes amiga bloggera

RTHB dijo...

Los esfuerzos siempre, ya tarden mas o tarden menos, tienen su recompensa. No lo dudes, este ultimo impulso y esta taza de café tendrán su recompensa.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Saludo de un desconcido a otro :P. El mundo está diseñado basicamente para que nos convirtamos en máquinas perfectas que no fallan. El fallo o el error, es sinónimo de pérdida, de retraso. Es paradójico el hecho, porque cuando uno se equivoca, es donde mas aprende....
Mi hiciste acordar cuando me levantaba a las 7 de la mañana para ir a volley en el colegio. Con los dedos entumecidos, le tenia que pegar a una pelota mas que dura....brrr que bajon.
Para finalizar, pasate si queres por mi blog que subi recien el ultimo cuentito....aaah y si te gusta Bradbury no puedo dejar de recomendarte el archi famoso Farenheit 451 (la temperatura que arden los libros) y Libro para inspirar a curas, rabinos y pastores desanimados....